1. Adherencia al cabello sobre la piel: La cera dura está formulada para adherirse principalmente al cabello en lugar de a la piel. Cuando se aplica la cera, se envuelve alrededor del cabello. Una vez que se endurece, crea una sustancia espesa que encapsula el cabello. Cuando se retira, arranca el vello desde la raíz sin tirar de la piel, lo que hace que el proceso sea menos doloroso en comparación con la cera suave, especialmente en zonas sensibles como la cara o la línea del bikini.
2. Baja temperatura: La cera dura tiende a aplicarse a una temperatura más baja que la cera blanda. Esto no sólo reduce el riesgo de quemaduras sino que también lo hace más cómodo para la persona que está siendo depilada. Esta característica es particularmente beneficiosa para personas con piel sensible o para depilar áreas sensibles del cuerpo.
3. Sin tiras de tela: a diferencia de la cera blanda, que requiere tiras de tela para quitarla, la cera dura simplemente se endurece y luego se retira con la mano. Esto puede hacer que el proceso sea más sencillo y menos complicado.
4. Bueno para el cabello áspero: debido a su fuerte adherencia al cabello, la cera dura es particularmente efectiva para eliminar los vellos ásperos y rebeldes que podrían no eliminarse por completo con la cera suave.
5. Irritación reducida: dado que la cera dura se adhiere menos a la piel y más al cabello, generalmente hay menos enrojecimiento e irritación después de la depilación, especialmente en áreas sensibles.
Para cualquier persona interesada en la depilación con cera, es fundamental comprender las diferencias entre cera dura y blanda y elegir la que se adapte a sus necesidades y a la zona específica que desea depilar.
