Durante la depilación con cera, hay varios errores comunes que las personas cometen y que pueden provocar molestias, irritación e incluso lesiones. Algunos de estos errores incluyen:
- Depilarse la misma zona repetidamente: Esto puede provocar irritación de la piel, enrojecimiento e incluso sangrado. Aplique siempre cera en un área nueva de la piel y elimine el vello solo una vez de cada área.
- Depilar un área demasiado grande a la vez: Intentar eliminar demasiado vello a la vez puede provocar dolor e incomodidad. Trabaja en secciones pequeñas, eliminando el vello gradualmente para minimizar las molestias.
- Usar el tipo de cera incorrecto para el área: Ciertas áreas del cuerpo requieren diferentes tipos de cera y el uso del tipo incorrecto puede provocar molestias, daños en la piel y una depilación ineficaz. Investiga el tipo de cera adecuado para el área que deseas depilar.
- Aplicar cera demasiado caliente: La aplicación de cera caliente sobre la piel puede provocar quemaduras, ampollas y cicatrices. Pruebe siempre la temperatura de la cera en un área pequeña de la piel antes de aplicarla en un área más grande.
- Quitar la cera en la dirección equivocada: La cera debe eliminarse en la dirección opuesta al crecimiento del vello para evitar su rotura y garantizar una depilación eficaz.
Para evitar estos errores, es fundamental seguir cuidadosamente las instrucciones, utilizar el tipo de cera adecuado para la zona a depilar y trabajar lenta y metódicamente. Si no estás seguro de cómo depilar un área específica o tienes la piel sensible, puede ser mejor buscar el consejo de un esteticista profesional.